PAUTAS PARA GARANTIZAR LA SEGURIDAD EN LA VUELTA AL TRABAJO
Gran parte de la población ha recibido el impacto del Covid-19 con grandes efectos negativos, donde todas las miradas se centrar en proteger la salud de las personas y reducir los efectos de la pandemia. No obstante, se hace más necesario avanzar a la normalidad y retomar la actividad habitual de las empresas, manteniendo el trabajo para paliar en la medida de lo posible el impacto que está sufriendo la economía.
Para incorporar unas medidas de prevención de contagios, el primer paso a dar consiste en definir las principales situaciones de riesgo a la que se enfrentan los trabajadores en los respectivos sectores. Actualmente las seis situaciones de riesgo que se pueden encontrar en las organizaciones en épocas de contagios son las siguientes:
– La falta de distancia mínima de separación. – Las aglomeraciones de trabajadores tanto en zonas de trabajo como en zonas de descanso. – La falta de actualización del registro de entrada y salida de los empleados. – La aparición de los síntomas de contagio durante la jornada laboral. – La propagación del contagio no detectado de casos positivos a tiempo. – La deficiente trazabilidad de los casos positivos detectados.
Después de haber planteado todas las posibles situaciones de riesgo, podemos avanzar poniendo en marcha las medidas de control para el restablecimiento seguro de las operaciones. De manera que es de vital importancia poner en marcha nuevos controles de prevención específicos, como: el control sanitario periódico, el uso de cámaras térmicas para la monitorización de síntomas, el control y la entrega de EPIs (Equipos de protección individual) a los trabajadores, las alertas de incumplimiento de las medidas preventivas, los protocolos de limpieza exhaustivos y, por último, la automatización de procesos de respuesta en caso de detección de positivos en el lugar de trabajo.
Parece evidente que la puesta en marcha de este tipo de procesos de control y seguimiento sobre la seguridad sanitaria seguirá en tendencia de cara al futuro y se deberá de extender en todos los sectores, pues no sólo permitirá contener la situación de crisis, sino también detectar de forma temprana y reaccionar con una respuesta mucho más eficaz.
